El tratamiento de nódulos mediante crioterapia

tratamiento de nódulos

Un tratamiento de nódulos permite eliminar este tipo de tejido de manera inocua e indolora. Los nódulos pueden aparecer por diferentes causas en varias zonas de nuestro cuerpo, en principio son fáciles de tratar y no tienen consecuencias para nuestra salud, pero es importante llevar a cabo un diagnóstico temprano y un tratamiento específico, para evitar que el desarrollo del nódulo pueda tener consecuencias negativas para nuestro organismo.

Qué son los nódulos

Un nódulo es un crecimiento subcutáneo, que se desarrolla bajo la piel de manera anormal y que puede contener tejido inflamado o fluidos, en los casos en los que se produzca una infección.

El tamaño de los nódulos suele exceder unos milímetros al de una espinilla, el tratamiento de nódulos es sencillo, pero conviene avisar a nuestro médico de inmediato si detectamos un crecimiento de este tipo.

La crioterapia puede ser muy eficaz para este tipo de tratamientos, mediante la congelación de la zona afectada podemos eliminar el tejido afectado, devolviendo a la piel su aspecto habitual, evitando además marcas y cicatrices. 

¿Cómo se desarrolla un nódulo?

Como ya indicamos, los nódulos tienen su origen en un tejido inflamado de forma anormal, que además, puede contener líquido si está infectado. La causa de los nódulos suele estar relacionada con pequeños daños que se producen en la piel, aunque siempre es recomendable que cualquier bulto de este tipo sea revisado por un profesional médico, debido a que en ocasiones un nódulo aparentemente inocuo puede resultar cancerígeno, si bien estos son los casos menos habituales. 

Por tanto, un nódulo se origina a partir de un tejido dañado, que va a crecer unos milímetros, generando una zona abultada perceptible a simple vista. En algunos casos las capas inferiores del nódulo pueden sufrir una infección, reteniendo líquido o bien capas de piel que retengan esta infección.

Nódulo en la glándula tiroides

Los nódulos en la glándula tiroides son quistes que suelen estar llenos de líquido, aunque también pueden ser sólidos. Este tipo de nódulo aparece en la tiroides, una glándula que se ubica en la base del cuello, sobre el esternón.

Los nódulos tiroideos no suelen ser perceptibles a simple vista debido a su tamaño y a su posición, suele ser el médico quien advierte su aparición. Es importante señalar que en un porcentaje muy alto, estos nódulos son inocuos, sin embargo, es recomendable seguir un tratamiento específico para liberar la glándula tiroides de cualquier tipo de nódulo.

Tipos de nódulos

Podemos distinguir entre tres tipos de nódulos diferentes en función de su composición.

  • Sólidos: Este tipo de nódulo tiene un interior producido a partir de células, con el mismo aspecto que la zona externa.
  • Líquidos: En este caso el nódulo contiene líquido en su interior, este tipo de nódulo es susceptible de sufrir infecciones.
  • Mixtos: Los nódulos mixtos disponen tanto de una parte sólida como de presencia de líquido en su interior. 

Ante la presencia de un nódulo es importante que sepamos cuál es su composición, de esta forma evitaremos posibles infecciones y podremos llevar a cabo un tratamiento específico, con el que eliminar el tejido sobrante.   

Las consecuencias de los nódulos intradérmicos

Es importante insistir en que por lo general, los nódulos son absolutamente inocuos, independientemente de su ubicación, sin embargo, un nódulo se manifiesta de la misma forma en la que aparecen tejidos cancerosos y otras complicaciones de la piel que sí pueden resultar nocivas para nuestra salud.

Es importante ante cualquier nódulo visible, consultar con un especialista que pueda determinar el origen del nódulo, su composición y en caso necesario, el tratamiento necesario para su eliminación. En muchos casos el propio nódulo puede reabsorberse, pero también existen casos en los que se produce una infección provocada en el tejido dañado, generando un problema grave.

El tratamiento de nódulos mediante crioterapia

En la actualidad existen distintos tratamientos orientados a eliminar nódulos y tejidos afectados. La crioterapia puede ser un método eficaz en muchos casos, debido a que el nitrógeno actúa sobre el tejido afectado insensibilizándolo. Los nódulos visibles, es decir, los que llegan a las capas externas de la dermis, pueden ser tratados de una manera muy eficaz mediante crioterapia localizada, aunque es importante que sea un profesional médico quien diagnostique el estado del nódulo y lleve a cabo el proceso, procurando evitar las marcas o cicatrices permanentes. 

Cryosense Zero para tratamientos localizados

En Cryosense hemos desarrollado una solución específica para zonas localizadas, se trata de Cryosense Zero, un aplicador de nitrógeno evaporado que permite llevar a cabo sesiones personalizadas. Al contrario de lo que sucede con las cabinas de crioterapia, en este caso no se trata de un tratamiento integral, sino que la aplicación es local, consiguiendo que una zona específica del cuerpo reciba el tratamiento deseado. 

FUENTES

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